Experiencias y pequeños trucos de un empresario viejo
Experiencia laboral temprana
Mi día empezaba alrededor de las 5:30 de la mañana. Hacía mis tareas diarias de casa y me disponía a ayudar a mi padre con el negocio. Cada vez estaba más y más asqueado con lo que hacía. Se puede decir que ya estaba en la cuerda floja del síndrome de “burnout”; también llamado síndrome de desgaste profesional, que consiste en la presencia de una respuesta prolongada de estrés en el organismo, e incluye fatiga crónica, ineficacia y escepticismo en el trabajo.
Concentración
Muchos empresarios sienten la necesidad de ir a por todas las oportunidades que se les presenten. Las oportunidades en muchas ocasiones son lobos con piel de oveja. Tendrás que hacer malabarismos para poder llevar una gestión correcta de todas las empresas de las que seas dueño. Es inevitable que la eficacia y la productividad bajen.
Sabes lo que haces. Haz lo que sabes.
No inicies un negocio por el mero hecho de que vas a tener unos hipotéticos márgenes de beneficios enormes. Haz lo que realmente te guste, lo que más amas. Los negocios construidos en torno al talento que tenemos, tienen una mayor posibilidad de éxito. Es importante que cada día que entres por la puerta de tu negocio estés satisfecho de lo que tienes. Si tu corazón no está en tu negocio, no tendrás éxito.
Define tu empresa en 30 segundos
No necesitas más tiempo para definir los servicios o productos que realiza tu empresa. Todas las palabras que digas pasados 30 segundos serán paja. Menos siempre es más.
No seas un “sabelotodo”
Nadie lo sabe todo, acepta críticas o consejos de tus empleados. Renuévate constantemente, el saber no ocupa lugar.
Actúa como si acabases de empezar con tu negocio
Olvídate de unas oficinas de lujo, los coches más rápidos y de tus cuentas bancarias. Nunca pierdas la pasión por tu empresa. Mantén un gasto más o menos fijo y administra bien la economía.
No te rindas
Quizá tu primer negocio te salga mal, no hay libro en el que te digan como tener un éxito del 100%. No hay un plan perfecto. Te convertirás en un buen empresario cuando “nazcas de tus cenizas”, como el ave fénix. La cosa más importante es aprender de tus errores y nunca cometer un error dos veces.
Ten una vida saludable
Serás mucho más productivo cuando te cuides de ti mismo. El espíritu empresarial es un estilo de vida. Trabajar hasta el punto del agotamiento te quemará y no serás productivo. Come bien, haz ejercicio y encuentra tiempo para ti mismo.
Acerca del Autor:
Este articulo fue escrito por Sergio Sanchez,
Assistant manager de préstamo por tu coche.
www.prestamoportucoche.net
Extraído de: http://www.negociosyemprendimiento.org/2014/11/experiencias-trucos-empresario.html